¿Por qué es ecológica?

Puede que un comportamiento “verde” haya sido un lujo en el pasado, pero ya se ha convertido en una necesidad que ninguno de nosotros podemos permitirnos ignorar. Cada vez más, la reducción de las emisiones de CO2 se está convirtiendo en un imperativo legal, además de una necesidad medioambiental.
Como media, más del 70% de las emisiones de CO2 de los hogares obedecen a la calefacción y a los sistemas de agua caliente. Para reducir esta cifra, debemos empezar a implantar tecnologías más ecológicas y sostenibles para todos por igual. Sólo entonces podremos constatar una reducción significativa de las emisiones de CO2.
mientras tanto, las fuentes de energía tradicionales mantienen una subida de precios constante, por lo que cada vez más gente se plantea el uso de fuentes de energía alternativas más eficaces.

Demostrado: calentar su hogar con una bomba de calor es la mejor opción para el medio ambiente.

Por distintas razones:

Un factor obvio es que la bomba de calor no utiliza ningún proceso de combustión ni ninguna otra energía para generar calor. Simplemente extrae el calor que ya existe en el aire, el suelo y el agua, y lo utiliza para calentar su hogar. Lo que significa menos emisiones.

En segundo lugar, y en comparación con otros sistemas de calefacción, la cantidad de electricidad necesaria es relativamente baja. Y es que la electricidad no es la principal fuente de energía, sólo se necesita para alimentar la bomba y permitir el proceso de extracción del calor. Aunque el ahorro energético exacto depende de con qué lo comparemos, normalmente suele oscilar entre el 60% y el 75%.

Otro aspecto interesante para tener en cuenta es que las bombas de calor, como cualquier producto fabricado, contienen la llamada “energía incorporada”, es decir, la energía necesaria para elaborar el producto y transportarlo desde la fábrica hasta el lugar donde se va a utilizar. Mediante la mejora continua de sus propios procesos, NIBE pretende reducir al mínimo la cantidad de energía incorporada de sus productos, para fabricarlos y transportarlos de la forma más ecológica posible.

Una vez instalada en su hogar, la bomba de calor NIBE empieza a “amortizarse ecológicamente” de forma inmediata a través de un recorte del consumo energético y de las emisiones.